Analisis: Nuevos desarrollos en motores turbofan electricos

Esta tecnología permitiría una propulsión más silenciosa y eficiente, más barata y menos contaminante. 
 
 
Rolls-Royce, está colaborando con Siemens y Airbus para desarrollar un avión híbrido en el que uno de los cuatro motores de turbina de gas -la turbina pintada de verde- estará alimentada únicamente por energía eléctrica. El avión tendrá tres turbinas de gas normales como respaldo, ya que las compañías prueban el motor verde en busca de seguridad y confiabilidad. El objetivo es volar este avión de prueba para 2020, lo que sugiere que la tecnología podría ser utilizada en las próximas dos décadas.
 
El modelo de avión para estas pruebas es un British Aerospace 146, o BAe-146 (también conocido como Jumbolino). Es un avión pequeño, de corto a medio alcance con 70 a 112 asientos, más comúnmente usado para rutas regionales. Es un avión distintivo, parece un avión de carga en miniatura con un diseño de ala alta y cola en T, con cuatro motores comparativamente pequeños. Este es un avión bastante viejo, volado por primera vez en 1981 y que sigue en servicio. Solo 144 de los 387 aviones construidos todavía están en operación en todo el mundo, mayormente Europa y Latinoamérica. 
En realidad, las pruebas de motores verdes no se realizan sobre un modelo de fuselaje ancho (el tipo de avión que realmente trae dinero a las aerolíneas, así como para fabricantes de aeronaves, motores y su cadena de suministro). En cambio, se emplea un avión en declive tecnológicamente hablando, para probar la fiabilidad de nuevas tecnologías de propulsión. Es decir, la tecnología se encuentra en la etapa prematura de esta potencial tecnología. Se está realizando una inversión en energía verde, tal vez más simbólica que realista, al menos en términos de un uso generalizado y rentable.
 
Por supuesto, el desarrollo continúa en otras escalas, Rolls-Royce está desarrollando la nueva caja reductora Power Gearbox que dará como resultado un 25% más de eficiencia de combustible en sus turbofans grandes para 2025 (en comparación con el modelo Trent 700 de 20 años). En cuanto a los motores Trent 7000 más nuevos, diseñados para Airbus A330neo de fuselaje ancho (de 250 a 440 pasajeros), Rolls-Royce afirma con confianza que estos motores están realizados "a prueba de ruidos y emisiones, fabricados con un amplio margen contra futuros cambios de objetivos medioambientales y de legislación." (Vea el apunte en este enlace) Rolls-Royce confirma que este turbofan ha sido diseñado para cumplir con las regulaciones futuras de emisiones y ruido que aún no han sido implementadas. Esto da tranquilidad a los compradores al asegurar que estas cosas ya han sido planificadas e integradas en el motor. La tecnología de motores a reacción más puntera, se encontraría ya en la etapa de reconocimiento implícito de que hay una mayor urgencia ecológica sobre lo que viene.
 
Y sin duda, incluso cuando los fabricantes de motores a reacción y aeronaves hacen un llamamiento a la tecnología más limpia, no es con el objetivo de reducir el transporte aéreo de personas. Con respecto a su modelo A330, Airbus registra 1.694 pedidos para estos aviones, de los cuales solo hay confirmados 1.373. El mensaje es claro: La demanda es mayor que la oferta, lo que significa que se necesita construir más aviones más rápido. Por lo tanto, incluso si los aviones que vienen son impulsados ​​por turbofans Trent 7000, que son más limpios, el objetivo exponencial sigue siendo poner cada vez más A330 de nueva generación en el cielo. Lo que, a forma de paradoja perversa, complica el alcanzar "objetivos ambientales" al haber aún más cantidad de aviones en el cielo.
 
Se podría argumentar que a medida que se retiran los viejos aviones, los aviones más nuevos y más eficientes simplemente los reemplazarán y esa consolidación reducirá emisiones. Sin embargo, está claro que Airbus y Boeing difícilmente podrán rechazar nuevos negocios o ralentizar la cadencia producción. La industria aeronáutica se encuentra en una carrera de dos vías: por el crecimiento a 20 años vista y por una eficiencia energética que sabe a poco o cuesta muchísimo implementar. Ambas trayectorias divergen en algún punto. 
 
En realidad necesitaríamos tener hoy motores turbofan eléctricos que ya estuvieran en etapas de desarrollo avanzadas. Esta es la verdad obvia pero incómoda que amenaza a la industria aeronáutica. Ya se han alcanzado ciertos límites en términos de velocidad, economía y comodidad y probablemente, el transporte aéreo humano que conocemos, no mejorará mucho en los años vista. Quizá es momento de abordar este asunto con detenimiento.
 
 
 
 
--------
 
 
 
¿Sabía que Conecband suministra aleaciones como Titanio, Inconel y Aceros inoxidables especiales para el sector aeronáutico Español?
Suscríbase a nuestro boletín para recibir nuevos análisis y noticias más relevantes del sector (haga clic aquí).
 
También puede seguirnos en las redes sociales:

Via, foto Airbus Press Release.

  Volver
Utilizamos cookies propias y de terceros para ofrecer una mejor experiencia y servicio. Si continua navegando consideramos que acepta su uso.