Se espera otra subida de precio de las bobinas de acero inoxidable.
Tras el fuerte crecimiento continuado de los recargos de aleación en marzo y visto desde la perspectiva actual, los recargos de aleación volverán a subir de precio el próximo mes de abril.
Los materiales que influyen en el extra aleación han tenido un aumento de precio uniforme. Por ejemplo, el molibdeno se ha apuntado otra subida extra el pasado mes.
Por este motivo esperamos que los precios suban ligeramente hasta alcanzar un nuevo máximo de 6 meses. En especial sobre productos planos y las aleaciones AISI 304- 1.4301 y algo más en 316L - 1.4404 (316L).
No obstante el clima del mercado ha mejorado significativamente, debido a que se da por hecho de que habría pronto un acuerdo en la disputa comercial entre China y los Estados Unidos.
Níquel
Como esperábamos, el níquel no pudo mantener su dinámica de crecimiento imparable hasta el mes de febrero. Aún así, el precio del níquel subió un notable 5 % en febrero y, de esta manera, también alcanzaba su máximo de seis meses la semana pasada.
Nuevamente observamos como el tema de la movilidad eléctrica vuelve a aparecer cada vez más en el escenario, debido a la ya conocida necesidad de sulfato de níquel para la tecnología de las baterías. Para algunos de los fabricantes de automóviles, como Audi, por ejemplo, tienen objetivos muy ambiciosos. Así que ahora se impone la presión para que en 2023 (no queda tanto) de cada 4 Audis, uno de ellos sea una versión eléctrica, rebajando el listón de 2025. Otro ejemplo, Smart se encuentra en una fase un poco más avanzada. Están trabajando para tener una porción considerable de sus vehículos con tecnología E-smart ya el año que viene. Los avances parecen estar desarrollándose más rápido de lo que podríamos haber imaginado hace poco más de un año.
Los niveles de existencias en el LME cayeron por debajo de las 200.000 toneladas en febrero por primera vez desde julio de 2013. Al mismo tiempo, el INSG (International Nickel Study Group) informa de que, debido al aumento de la demanda de tecnología de baterías, la producción mundial de níquel ahora está en máximos. Como consecuencia, el déficit de la oferta de níquel podría desaparecer (En 2018
informábamos que había un déficit de 117.000 toneladas) Por lo tanto, la reducción de los niveles de existencias del LME pronto debería de empezar a moderarse.