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Empieza el año 2019 con importantes subidas en los precios de las materias primas.

Estas influyen notablemente en los precios de venta de las bobinas de acero inoxidable.

Observamos que el precio del níquel ha subido nuevamente y con fuerza como observamos en esta gráfica:

 

 

El níquel se ha anotado una subida del 17% durante el transcurso de enero, si bien durante febrero ha moderado ligeramente el precio negociado. 

 

El pasado día 25 de enero se produjo el desafortunado desastre de la presa de contención de residuos de la mina de Brucutú en Brasil. 

Desde entonces, el precio del mineral de hierro ha subido un 16% y el níquel un 17,7%. Vale también extraía Níquel de Brasil y se vió forzada a declarar la “fuerza mayor” en numerosos contratos. Peor lo ha llevado el mineral de hierro que se apuntó una subida del 27%.

 

 

En realidad, ha sido un reflejo del conjunto de los metales industriales, que han subido de precio un 6,25% desde principios de año. 

 

 

De forma que hay una subida generalizada del precio de las materias primas que afectan a las bobinas de acero inoxidable. En realidad es algo que afecta a casi todas las materias primas (en este momento sólo hay 4 de 25 con caída de precio en 2019).

Observamos también que los stocks de Níquel del LME vuelven a caer:

 

 

De forma que otra vez vuelve el mercado estar enrarecido. No hay duda de que habría en estos momentos un fuerte componente especulativo en todos estos movimientos. ¿Hasta cuando durará este tirón en los precios de las bobinas inoxidables? Recientemente se ha conocido la opinión a un mes vista de empresarios y directivos del sector manufacturero (que utilizan los metales industriales en su proceso productivo). En este momento, su visión es más bien pesimista. De forma que este repunte de precios podría tener vida corta a la espera de acontecimientos o de la evolución de la economía.